¡Qué culturita!

La conservación del mobiliario urbano demuestra la cultura ciudadana de los habitantes de un barrio o de una ciudad.  Denunciar a los vándalos es un compromiso de toda la comunidad.

Un residente de Puerto Madero, que transitaba en compañía de su esposa por la Carrera 66 con Calle 23A, observó una conducta inadecuada por parte de un motociclista, quien decidió utilizar el espacio público como mingitorio.  Ante la situación, el residente hizo la respectiva observación.

 

Cuál no sería la sorpresa, cuando el motociclista reaccionó enfurecido y mostró su indigencia cultural al agredir verbalmente a la pareja.  Incluso, el desadaptado decidió exhibir sus partes íntimas, lo que precipitó que la situación llegara a la agresión física, cuando el motociclista golpeó con su casco al residente.  Este no es un asunto de intolerancia: es un residente reclamando respeto ante un desadaptado violento que no tiene pudor ni dignidad… Ni cultura ciudadana.

Con esa boca…

Uno de los guardas de seguridad de Ciudad Salitre Oriental reportó la presencia de dos sujetos que estaban consumiendo sustancias psicoactivas en inmediaciones de Serranilla.  Ya en el lugar, las unidades motorizadas de ASOBEL constataron la presencia de los individuos a quienes les solicitaron retirarse del lugar.

 

Ante el llamado de atención, los consumidores decidieron alejarse del sitio, no sin antes proferir cuanta grosería y vulgaridad está consignada en el paupérrimo diccionario de sus mentes… De la abundancia del corazón habla la boca.