¿De qué se trata?

Contribuir, intervenir, colaborar, cooperar, compartir, terciar, mediar, asociarse… En la convivencia cotidiana, en el actuar social de cada individuo, estas palabras cobran una importancia inusitada, pues del uso y aplicación real que cada ciudadano les dé, depende en buena medida el progreso y bienestar de la comunidad y de la nación.

 

Aprovechando la proximidad del Día del idioma, es bueno aclarar que las palabras con las que iniciamos esta editorial son sinónimos de un concepto que es el combustible que mueve a ASOBEL: la participación.

 

En diferentes escenarios, nuestra gente tiene la oportunidad de participar activamente, aportando al mejoramiento de las condiciones de vida presentes y futuras: desde las reuniones de copropietarios, pasando por la Asamblea de ASOBEL, hasta las capacitaciones y actividades que realiza la Asociación para beneficio de toda la comunidad; todos recibimos un llamado –que en la práctica es una exhortación ética y moral- a contribuir con nuestras intervenciones y con nuestra colaboración desinteresada, al desarrollo social y territorial del sector. 

 

Es más: la cooperación, como sinónimo de participación, resulta fundamental para el bienestar de todos los que tenemos el privilegio de compartir el territorio de Ciudad Salitre Oriental.  Para tal fin, la vinculación de nuestra gente con las labores que adelanta ASOBEL, -que no es otra cosa que asociarse para actuar y participar, con hechos e ideas, en las distintas instancias propias de la Asociación- da como resultado la valorización de cada unidad residencial, la unión para alcanzar fines comunes y la fuerza de una vocería realmente representativa de todo el sector en general. 

 

Es de Perogrullo, pero las voces aisladas, sin institucionalidad alguna, irresponsablemente aventureras e improvisadas, que prometen mucho menos de lo que ASOBEL hace y demuestra; aupadas además por ciudadanos ingenuos que son cautivados por la novedad y por el desconocimiento de las labores cotidianas de nuestra Asociación; solo debilitarían un sector de Ciudad Salitre Oriental y generarían mayor vulnerabilidad para sus residentes. 

 

En esta oportunidad, nuestra invitación es a participar, a dejar de lado la indiferencia o la pereza, y comenzar a actuar como ciudadanos y como poseedores de un patrimonio que de forma mancomunada, debemos proteger y hacer respetar en el marco institucional presente en nuestro territorio… ¿Le gustaría tener un escenario propicio para cumplir con estas metas? ¡Para eso está ASOBEL!