Ingreso no autorizado a la obra abandonada: evitemos una desgracia
Por Sandra Milena Muñoz Arévalo, Gerente de ASOBEL
Durante los últimos meses, las unidades motorizadas de
ASOBEL y la Policía de Teusaquillo han trabajado intensamente para evitar el
ingreso no autorizado a la obra del Comando de la Policía Metropolitana de
Bogotá.
Por desgracia, la mayoría de los que entran sin permiso
al lugar, son jóvenes que residen en Ciudad Salitre Oriental que incluso han señalado
el sitio en redes sociales, como un punto de encuentro y adrenalina. El riesgo que asumen es enorme, pues la obra
es una estructura a medio terminar, sin accesos ni elementos de seguridad para
quienes deciden aventurarse al interior de ese elefante blanco que tenemos que
padecer en Ciudad Salitre Oriental.
Quienes ingresan, recorren la estructura y arriesgan su
integridad y su vida para buscar hacer en privado lo que no pueden hacer en
público. También lo hacen para sentir el vértigo de penetrar a un sitio no
autorizado.
Lo peor es que, además de las lesiones que pueden sufrir,
hay otra amenaza potencial en la obra: así como entran estos jóvenes, también
lo hacen habitantes de calle y hasta delincuentes que encuentran un escondite
en dicha estructura. Esto significa que
el riesgo de ser asaltados es real y que además de perder las pertenencias,
pueden ser víctimas de una agresión física e incluso armada… ¿estarán
conscientes de esto?
Los que sí deberían tener claros los peligros son los
padres de familia, pues una estructura abandonada, los escombros propios de una
obra sin rematar y el compartir espacios con ciudadanos habitantes de calle e
incluso con antisociales, son riesgos reales que todo adulto conoce.
¿Por qué los padres de familia de estos jóvenes, que son
conocidos en sus conjuntos y en el sector, mantienen una actitud de desidia y
se desentienden del riesgo para sus hijos y de la problemática que le están
generando a la comunidad?
Nuestros asociados se quejan de esta situación, la que
enfrentamos de acuerdo a lo que nos es permitido, pero sin la participación de
las familias, sin su compromiso serio para evitar que sigan corriendo riesgos
en ese sitio, estamos asistiendo al preámbulo de una tragedia anunciada.
Por todo lo anterior, hacemos un llamado a los padres de
familia de estos residentes, para que apoyen a la Asociación, y a la comunidad
en general, en el propósito de evitar las irrupciones al elefante blanco y así
prevenir una desgracia en Ciudad Salitre Oriental.
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